Washington, 11 jul (Prensa Latina) El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, aprobó hoy una declaración de emergencia para Vermont debido a las fuertes inundaciones que afectan a ese territorio del noreste del país.
Un comunicado de prensa de la Casa Blanca precisó que esta mañana el mandatario, «mientras estaba en Vilnius, Lituania», donde participa en la cumbre de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), «declaró que existe una emergencia en el estado de Vermont y ordenó la asistencia federal».
La medida permitirá que el Departamento de Seguridad Nacional y la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA) coordinen todos los esfuerzos de socorro en casos de desastre.
Según la declaración se extenderá a los 14 condados del estado: Addison, Bennington, Caledonia, Chittenden, Essex, Franklin, Grand Isle, Lamoille, Orange, Orleans, Rutland, Washington, Windham y Windsor.
Una «situación potencialmente peligrosa» se gesta para la capital de Vermont, Montpelier, dijo este martes una publicación en Facebook de William Fraser, gerente de la ciudad.
Explicó que a la presa Wrightsville solo le quedan dos metros de capacidad de almacenamiento y si el agua la excede el primer aliviadero liberará agua en el río North Branch.
«Esto nunca ha sucedido desde que se construyó la presa, por lo que no hay precedentes de posibles daños. Habría una gran cantidad de agua entrando en Montpelier, lo que se sumaría drásticamente a los daños por inundaciones existentes», subrayó el funcionario.
«Desafortunadamente, quedan muy pocas opciones de evacuación», enfatizó Fraser al insistir que las personas de áreas de riesgo deben ir de manera preventiva hacia los pisos superiores de sus casas.
No hay informes de lesiones o muertes relacionadas con las inundaciones de Vermont ocurridas hasta ahora, según los funcionarios de emergencia.
Pero se cerraron docenas de caminos, incluidos muchos a lo largo de la columna vertebral de las Montañas Verdes, y el Servicio Meteorológico Nacional emitió advertencias de anegaciones repentinas para gran parte del estado desde la línea norte de Massachusetts hasta la frontera con Canadá.
Las lluvias en movimiento lento llegaron a Nueva Inglaterra después de golpear partes de Nueva York, donde una persona murió cuando intentaba salir de su casa durante la inclemencia meteorológica.
Destacan reseñas de prensa que las intensas tormentas que inundan el noreste de Estados Unidos están convirtiendo las calles en ríos, obligando a evacuaciones y a cerrar el centro Montpelier.
Las amenazas que se ciernen sobre Vermont suscitaron comparaciones con el huracán Irene en 2011, que dejó comunidades enteras sumergidas y causó la muerte de al menos 40 personas en todo el territorio estadounidense.